jueves, 7 de febrero de 2013
El Super Bowl XLVII marcado por los hermanos Harbaugh, estuvo lleno de cifras para llamar la atención. El Super Bowl logra cada año enormes cifras de audiencia, en 2012 logró un total de 111.3 millones de espectadores. Este impacto hace que los costos por anunciarse durante este partido sean altísimos, según Nielsen, empresa dedicada a mediciones de audiencia y marketing, este año el costo promedio por 30 segundos de publicidad fue de 3.4 millones de dólares, 300 mil más que el año pasado.
Según la empresa, además de la penetración que puede lograr un anuncio que se transmite durante la final de la NFL, su efectividad aumenta: 34% de los anuncios resultan más memorables y el 42 por ciento agradan más a los televidentes, esto en comparación con los que se transmitieron durante el mes anterior. El sector que más recursos invierte como anunciante en el Super Bowl es el automotriz.
El Super Bowl es también el espectáculo que más estadounidenses concentra frente al televisor. El año pasado, la final de la liga profesional de fútbol americano atrajo 111,3 millones de telespectadores, una cifra récord que superó ligeramente la de 2011. Y este año se calcula que más de 115 millones de estadounidenses se sentaron frente al televisor para ver el enfrentamiento entre los Ravens de Baltimore y los 49ers de San Francisco.
Además Infobae recopila algunos datos curiosos que muestran el impacto del evento deportivo No. 1 en Estados Unidos:
1.Se estima que 7.5 millones de personas compraron un televisor para no perderse la final del Super Bowl.
2- Es el fin de semana que menos bodas hay en todo el país. El 6% de los empleados dice sentirse enfermo al día siguiente del partido.
3- El domingo las ventas de Domino's Pizza se incrementan en un 30%, ya que se estima que un 60% de las personas que ven el partido piden comida para llevar.
4- La guerra en las redes sociales la ganó el equipo de San Francisco que cuenta con más de un millón 674 mil seguidores en Facebook y más de 329 mil en Twitter. Baltimore tiene más de un millón 342 mil seguidores en Facebook y más de 270 mil seguidores en Twitter.
5. Más de mil 200 policías y cerca de 100 agentes adicionales del FBI estuvieron a cargo de la seguridad.
6.Tuvo un impacto económico en Nueva Orleans de US$ 434 millones. Un gasto de manera directa con los negocios de la ciudad de 211 millones de dólares y de 223 de forma indirecta.
Este año, el Super Bowl XLVII estuvo marcado por millonarias cifras pero también por el apagón que supuso uno de los capítulos más penosos en lo que va de la historia de los Súper tazones. Los anunciantes perdieron la atención de la audiencia debido al famoso zapping, y es que en un momento de interrupción que se prolongo por 30 minutos los televidentes aprovecharon para cambiar de canal, levantarse al baño, por botanas o simplemente a aprovechar esos 30 minutos para otra cosa que no tuviera que ver con el televisor. Inevitablemente, el suceso preocupó a los anunciantes mientras entre los aficionados a la publicidad la especulación no se hizo esperar. Dudaban de que el apagón no hubiera tenido consecuencias sobre las tasas de audiencia durante el resto del partido, o planteaban que los anunciantes que habían pagado por espacios en el último cuarto o en el final del partido se enfadarían o, peor aún, pedirían una compensación. Marcas como Coca-Colao SodaStream no debieron pasarlo bien durante el apagón. El gigante de los refrescos contaba con un spot después del partido con el que concluir la historia que ya presentó en el segundo cuarto. Por otro lado, SodaStream, que se estrenaba este año, tenía previsto un spot en el último cuarto que ridiculizaba a la industria de los refrescos.
Mientras, otros anunciantes aprovecharon el apagón para aumentar el alcance de sus anuncios ya emitidos. Audi tuiteó: “enviando algunos LEDS al Sueprdome @MBUSA ahora mismo”. Oreo en cambio publicó una foto en Twitter en la que contaba lo divertido que era mojar la galleta a oscuras, y Tide comentó: “No podemos arreglar el #blackout (apagón), pero podemos limpiar vuestras manchas”. Todavía no está claro qué tipo de recompensas recibirán los anunciantes perjudicados. Por contrato, la CBS está obligada a emitir los anuncios en un momento específico del partido, pero lo cierto es que una vez solucionado el incidente eléctrico la emisión siguió como estaba previsto. Además, la cadena no tiene una forma sencilla de ofrecer una compensación o inventario extra que compense la caída de audiencia, ya que el número de espectadores del Super Bowl es tan enorme que la cadena se vería obligada a emitir un mismo anuncio una y otra vez para poder alcanzar una audiencia similar.
Para los medios internacionales que cubrieron el Super Bowl, el apagón causó un gasto extra, pues el costo por los derechos televisivos del evento no incluyó esos 34 minutos en que el evento se suspendió y que los satélites tuvieron que absorber. La cifra del gasto extra aun no se ha dado a conocer pero seguro no será nada barato.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios: