Desprestigiando

Por Fernanda Sánchez 

@Mafersar 

Horacio Sánchez. ¿Quién es? ¿A qué se dedica? ¿De qué vive?... Claro, de hablar de su famoso y exitoso tío: el Pentapichichi y el mejor jugador mexicano de la historia, también el técnico bicampeón de los torneos cortos y el que regresó al Bernabéu como técnico a ganarle al equipo que forjó su leyenda, el Real Madrid. 

Qué tristeza y qué vergonzoso resulta que un sobrino se cuelgue de la fama de Hugo con declaraciones tan bajas e infames como mezclar dinero y fútbol. También tendrá algo que ver el diario en el que aparecen estas declaraciones y que únicamente se quedan en eso: en declaracionismo un síntoma de lo podrido que está el periodismo deportivo, ¿Por qué presentar estas declaraciones que no tienen ni prueba? El diario para mi se juega su prestigio, hay que hacer una investigación que sustente y demuestre lo que este joven afirma. De todos es sabido que entre los Sánchez Márquez hay problemas personales como en su día los hubo con los Sánchez Portugal.

Me parece que se está cayendo en un sitio común, “hay que pegarle al grande”. Es cierto que Hugo es de esos personajes que generan blancos y negros o lo amas o lo odias pero los resultados ahí están y son incuestionables, lo puedes odiar pero no le puedes quitar su grandeza, porque por eso lo odias. Tan sencillo es que si Hugo hubiera cobrado como su sobrinito afirma ese equipo no hubiera sido bicampeón, porque no hay que jugarle al adivino para prever que un equipo con esa problemática no sale avante de nada por la generación de envidia que se da si unos juegan por pagar y los que son banca aun siendo mejores no jueguen. Ese equipo que despertó la pumamanía se caracterizó por ser un grupo de amigos, ahí están Jaime Lozano, Bruno Marioni, Kikín Fonseca, Diego Alonso, Odín Patiño, Ailton Da Silva y varios más que se caracterizaron por hacer piña y lograr lo que lograron. Resulta realmente barato que un familiar con rencillas personales ponga en duda y en riesgo una carrera profesional de alguien de la talla de Hugo, en primera porque en lo que se investiga, si es que se hace, el nombre de Hugo queda en entredicho así como su ética y profesionalismo. 

El periodismo deportivo, es cierto está para contarnos historias alrededor de los personajes del deporte pero una cosa son historias y otras chismes sin fundamento que lo único que hacen es demeritar una enorme carrera en la cual debemos todos reconocer ha sido inigualable e incuestionable. Me alegro que hayan salido sus futbolistas, aquellos que él ayudo a consagrar a defenderle, porque siendo Hugo la cabeza de aquel exitoso proyecto no merecía menos, a muchos les dió la oportunidad y ellos le pagan con buena cara: diciendo la verdad. No ensuciemos lo que a todas luces fue honesto sobre todo porque aquí salen muchos raspados, el diario, el periodista que firmó la nota, el propio Hugo, su sobrino y una maravillosa y enorme institución: La UNAM y su equipo representativo de fútbol.